Cannabis Tricomas. Qué son y por qué están ahí
Published :
Nov 10, 2016
Categories :
Marihuana medicinal
Los tricomas son la joya de la corona de las plantas de marihuana. Estas glándulas microscópicas son la parte fundamental del cultivo y el placer de la hierba.
INTRO
La próxima vez que te coloques con un shatter o que unos cogollos bien madurados y recubiertos de cristales te den una elevación física; cuando esos viscosos aceites azul oscuro lubriquen tus articulaciones doloridas o cada vez que los cristales de miel conviertan tu mundo en fosforito; agradéceselo a los tricomas, unas grandes maravillas microscópicas. Esas diminutas setas cristalinas que cubren ampliamente las flores de la marihuana maduras y que albergan complejas resinas.
¿QUÉ SON LOS TRICOMAS?
"Un pequeño pelo u otro apéndice de la epidermis de una planta, normalmente unicelular y glandular."
Una glándula es una estructura celular de las plantas y animales, que segrega sustancias químicas particulares para su uso en el cuerpo o para expulsar al entorno. En los cálices y pistilos de las flores maduras de marihuana femenina sin fertilizar, esos tricomas de tallo y cabeza forman glándulas que desarrollan una compleja biosíntesis. A partir de los fitoquímicos iniciales se crean metabolitos, entre los que se encuentran los cannabinoides específicos de la marihuana. Además, más de cien terpenos son producidos y segregados en forma de resinas que se acumulan en cavidades secretoras. Esas resinas proporcionan una barrera defensiva para la supervivencia de la planta en la naturaleza. Los terpenos son la familia más diversa existente en las plantas y se suelen relacionar con la resistencia de las plantas contra patógenos, hongos, herbívoros e insectívoros. La familia cannabinoide de los compuestos fenólicos puede actuar como antioxidante y proteger a la planta del estrés oxidativo. Cuando se recogen y se secan los tricomas, las resinas resultantes son psicoactivas para el ser humano y terapéuticas de diversas maneras.
PASADO Y PRESENTE
Mucho antes de que apareciesen extractos exóticos ya existía el hachís doble cero. Es el primer filtrado de la marihuana marroquí seca. Se colocaba un gran cuenco bajo un filtro muy fino y los tricomas se desprendían de la hierba hasta que había suficiente para moldear en un bloque y usar para fumar. Primera calidad, material premium que en otras épocas era venerado en todo el mundo. En función del lugar de origen de la marihuana, las características propias de los tricomas producen hachís de distintos colores. Desde un pakistaní con un rojo sugerente a un marroquí dorado o un afgano negro. Los grinders de 4 piezas hacen exactamente lo mismo hoy en día. Los colores son tan variados como los miles de variedades disponibles y se quedan en la bandeja de abajo en forma de quife delicioso y pegajoso. Desde el violeta oscuro de la Grand Daddy Purps al dorado blanquecino de una Lemon Haze. Es el doble cero de la nueva escuela. Tricomas en estado puro. La esencia de la planta.
Hachís, terpenos, ceras, aceites, shatters y demás concentrados deben todos su existencia a los modestos tricomas. Cada producto tiene una manera de traernos los ricos contenidos de los tricomas, concentrándolos sin usar ninguna materia orgánica. Los tricomas de sativas ricas en THC recogidos sin madurar, aún blanquecinos, pueden procesarse en una cera que provoca un subidón cerebral estimulante, una experiencia multicolor estupenda. Unas índicas ricas en CBD bien maduras, con tricomas oscuros, utilizadas para extractos de aceite pueden proporcionar efectos terapéuticos para mente y cuerpo, con gran textura, intensidad y calidad.
LOS TRICOMAS TE PUEDEN LLEVAR DE VIAJE
Junto con el estado de los pistilos, el color de esas maravillosas fábricas de fitoquímicos son un indicador claro de la madurez de la marihuana y el momento oportuno para cosechar. Cuando la planta madura, los tricomas producen varios cannbinoides que tienen diversos efectos. Al principio de la fase de floración los tricomas son transparentes. Los cálices aún tienen que crecer y los pistilos o pelos todavía están blancos o amarillos. Los tricomas siguen cristalinos hasta que la planta ha acabado de florecer. Pronto, los cálices se desarrollan y los tricomas empiezan a perder su transparencia, volviéndose blanquecinos. Sus troncos se curvan hacia la superficie de la planta y tienen un caparazón abultado lleno de resina. En este punto, los pistilos empiezan a apagarse y su color se hace más oscuro. Dependiendo de la cepa éste puede ser amarillo oscuro, naranja, marrón claro o violeta.
Durante las últimas semanas los tricomas empezarán a desarrollar un color que depende de la variedad, pero siempre será más oscuro. Pasan de blanco uniforme a ámbar o quizás de rosado a lila, en el caso de las Purples. El THC es más abundante cuando los tricomas están empezando a cambiar de blanco al color específico de la cepa y los pistilos se están volviendo más oscuros. Los depósitos de resina estarán a tope, pero todavía perfectamente conectados a su tallos. En ejemplares muy maduros, la cabeza del tricoma caerá por su peso. El THC se degrada en CBD y otros cannabinoides con propiedades terapéuticas cuanto más se deje madurar la flor y cuanto más oscuros sean los tricomas. La experiencia te permitirá personalizar tus cultivos para conseguir el efecto que busques para ti.
CONCLUSIÓN
Saber cuándo, cómo y por qué se producen los cambios en los tricomas te garantiza poder aprovechar la marihuana al máximo. Sea para convertirte en un productor de hierba de primera clase, para producir extractos increíbles o simplemente para ser un consumidor bien informado o un aficionado de este pequeño universo multicolor. Equipado con una lupa de fotografía, un mini microscopio o una buena lente de aumento, puedes sacar el máximo provecho a este minúsculo mundo caleidoscópico de los tricomas.