Cómo combate el CBD los trastornos relacionados con la ansiedad

¿Podría el CBD ofrecer una alternativa natural y eficaz a los diferentes tranquilizantes adictivos que muchos médicos recetan con excesiva facilidad? Posiblemente, sí. Este compuesto no psicoactivo del cannabis puede jugar un papel importante en la modulación de la respuesta neuronal al estrés. Los estudios se centran ahora en este cannabinoide como tratamiento para trastornos relacionados con la ansiedad.

¿QUÉ PASA CON LA ANSIEDAD?

La ansiedad es una de las respuestas adaptativas que ayudan a los animales a manejar amenazas o llevar a cabo tareas duras. Por diferentes razones, la ansiedad es igual de útil que el dolor, el enfado u otros sentimientos. Obviamente, estas respuestas fisiológicas y físicas deberían controlarse dentro de ciertos niveles de intensidad. De lo contrario serían perjudiciales para el individuo.

Los trastornos relacionados con la ansiedad afectan a una gran proporción de la población. En ocasiones, trastornos leves evolucionan hacia problemas neuropsiquiátricos como el terror, pánico, trastornos por estrés postraumático, ansiedad social o trastornos obsesivo-compulsivos. Cuando una persona no puede manejar sus respuestas naturales eficazmente, cayendo en un estado de trastorno de ansiedad, es importante no subestimar este problema.

Por desgracia, la manera más habitual y efectiva de soportar los síntomas de la ansiedad es también la más peligrosa. Las pastillas de receta fabricadas por las grandes corporaciones farmacéuticas. Un gran porcentaje de los pacientes tratados con medicamentos como Prozac, Valium y Xanax acaba cayendo en la dependencia de uno o más de estos productos adictivos y peligrosos, o caen en otras adicciones como el alcohol o drogas duras.

EL CBD Y LA QUÍMICA DE LA ANSIEDAD

Los mecanismos bioquímicos capaces de provocar la ansiedad como respuesta instintiva en animales todavía no se conocen en profundidad. En la medicina convencional, algunas formas de depresión y trastornos relacionados con la ansiedad se tratan habitualmente con medicamentos que actúan sobre el sistema de la serotonina. Estas drogas bloquean la reabsorción natural de serotonina en el cerebro tras su producción, incrementando así su concentración alrededor de las neuronas. El efecto del aumento de las señales de serotonina trasmitidas a través de las vías del sistema nervioso es normalmente una reducción de la ansiedad y una mejoría en el estado de ánimo, tanto en humanos como en ratas.

De forma similar, el CBD incrementa la actividad de señalización en los receptores de serotonina. Un estudio reciente, llevado a cabo en un laboratorio español, sugiere que el CBD podría representar un remedio antidepresivo a corto plazo, gracias a su capacidad para potenciar la señalización de serotonina y glutamato. La rata bulbectomizada es un modelo habitual de depresión en laboratorio. Los investigadores utilizaban ratas estresadas porque estar privadas de su sentido del olfato. La actuación de la potente acción antidepresiva fue muy rápida tras una inyección de CBD, mientras se registraba un efecto ansiolítico simultáneo.

El hipocampo es una parte ancestral del cerebro de todos los vertebrados, incluyendo el ser humano. Juega un papel importante en la consolidación de la memoria y en la capacidad de orientación. Se trata de una de las primeras regiones del cerebro afectada por ciertas enfermedades. El escáner cerebral de un paciente que sufre depresión o ansiedad suele descubrir un hipocampo más pequeño de lo habitual, y parece que una actividad neuronal deficiente en esta área del cerebro puede influir en los comportamientos suicidas. Un estudio de laboratorio llevado a cabo en la Universidad de Sao Paulo descubrió que el CBD podría ayudar a la regeneración de neuronas en el hipocampo. Los descubrimientos de los investigadores brasileños indican que el efecto ansiolítico de la administración de CBD en ratas estresadas depende de la señalización mediante el sistema endocannabinoide, que es capaz de incentivar la regeneración de células neuronales.

CBD: DEL LABORATORIO A LOS ESTUDIOS CLÍNICOS

En los últimos años, el CBD ha generado una gran expectación entre consumidores, médicos y científicos. Las pruebas de laboratorio apoyan firmemente el potencial del CBD como tratamiento para trastornos de ansiedad, pero resultados prometedores en ratas no siempre se traducen en terapias efectivas para el ser humano. Además de la acumulación de evidencias empíricas, algunos estudios realizados con metodologías científicas están empezando a demostrar el potencial del CBD como tratamiento para trastornos de ansiedad.

Investigadores brasileños desarrollaron un pequeño estudio en pacientes con ansiedad social, mostrando que el CBD disminuye sus síntomas. Esto se confirmaba tanto por las impresiones de los participantes como a través de los indicadores físicos de la ansiedad, como el pulso, la presión sanguínea y otros parámetros corporales. Los científicos concluyeron que el CBD realmente reducía la ansiedad, las deficiencias cognitivas y el malestar en este grupo de pacientes.

Por último, dado que el CBD es un antagonista del THC, cuando estas moléculas se combinan en nuestros receptores cannabinoides, se ha demostrado mediante estudios de laboratorio y la experiencia de los pacientes, que contrarresta algunos de los efectos adversos del THC relacionados con la ansiedad, durante terapias basadas en compuestos del cannabis.

Las pruebas de los estudios en animales empiezan a desvelar cómo actúa el CBD en el cerebro, y los estudios en humanos con pacientes afectados de trastornos diagnosticables o no, empiezan a corroborar su eficacia como tratamiento ansiolítico. La evidencia preclínica, primeros ensayos clínicos y la experiencia autónoma de los pacientes, respaldan totalmente al CBD como remedio único o complementario para el tratamiento de trastornos de ansiedad generalizada, pánico, ansiedad social, trastornos obsesivo-compulsivos y por estrés postraumático, y depresiones leves. Es necesario seguir investigando y acabar con el prohibicionismo para entender los efectos a largo plazo y el potencial real del CBD. Por el momento es interesante saber que es completamente seguro en comparación con cualquier medicación actual a la que podría sustituir, replicar o complementar.