¿Qué son los híbridos de cannabis y cómo se crean?

Cuando se visita un dispensario de cannabis californiano o un coffeeshop holandés, un simple vistazo al menú es suficiente para confundir a los clientes novatos, e incluso a algunos fumadores veteranos. ¿Qué son todos esos nombres? ¿Son solo marcas o quieren decir algo más? El cannabis es una hierba sumamente diversa y multifacética. A diferencia de otras sustancias, su efecto puede variar enormemente de una variedad a otra. Desde su contenido de cannabinoides hasta el de terpenoides, todo puede alterar el efecto que experimenta el fumador.

El mercado está repleto de variedades distintas, y muchas de ellas son híbridos.

¿QUÉ SON LAS VARIEDADES HÍBRIDAS?

Las variedades híbridas son exactamente lo que dice su nombre. Una combinación de las principales subespecies del cannabis: índica y sativa. Estas dos grandes familias pertenecen a la misma especie de cannabis, pero representan unas diferencias evolutivas que han ocurrido con el paso del tiempo. Dichas diferencias se manifiestan en el aspecto físico y la composición química de la planta.

Las variedades sativa se suelen asociar con un efecto más enérgico y cerebral, que es más indicado para su consumo diurno. Las sativas se utilizan para llevar a cabo tareas creativas y que requieren de atención y concentración.

Por otro lado, las variedades índica son famosas por su efecto de colocón físico. Este tipo de efecto es mucho más compatible con el consumo vespertino, para relajarse y desconectar. Las variedades índica también están asociadas con el alivio del dolor y los trastornos del sueño.

¿CÓMO SE CREAN LOS HÍBRIDOS?

La hibridación permite que el cultivador seleccione los rasgos más deseables de las variedades madre, y que los transmita a su descendencia. Por ejemplo, un criador puede desarrollar una variedad con un alto contenido de THC, o rica en cierto terpeno.

Un ejemplo muy actual de la importancia de los híbridos se puede ver en cómo el CBD es cada vez más popular y está más aceptado como sustancia terapéutica. Hoy en día, los criadores buscan el deseado ratio de CBD:THC de 1:1. Esto se consigue mediante una minuciosa selección e hibridación, ya que no existen variedades autóctonas que presenten este perfil cannabinoide de forma natural y consistente.

Los híbridos también se pueden producir en la naturaleza, pero tienden a ser más inestables. Esto significa que las nuevas generaciones expresarán rasgos sumamente diversos heredados de sus padres. Los criadores pueden crear genes más estables a través de varias generaciones de endogamia, en un acto conocido como retrocruzamiento.

TIPOS DE VARIEDADES HÍBRIDAS

Aunque los híbridos se componen de genes índica y sativa, a menudo suelen dominar unos sobre los otros. Por ello, las plantas son propensas a expresar más rasgos del padre dominante.

Una variedad también puede tener una ligera predominancia sativa o índica, lo que se traduce en un efecto más equilibrado. Dicho esto, la hibridación es un proceso fascinante por el cual una planta sativa dominante, por ejemplo, presenta rasgos típicamente índica dependiendo de la cepa cultivada. Debido a la gran variedad de genes disponibles, no hay límites en cuanto a lo que se puede lograr con los híbridos modernos.

En general, sin embargo, los híbridos índica dominantes provocarán un efecto más físico, y aun así presentarán elementos de subidón mental en la mezcla. Los híbridos sativa dominantes tendrán un efecto más energético, y ofrecerán a los fumadores un subidón cerebral que se transforma en una sensación de colocón relajante.

Los híbridos verdaderos, o al 50/50, presentan un equilibrio exacto, con un 50% de genes índica y un 50% sativa. Es lógico pensar que estos híbridos verdaderos inducen un efecto muy completo con rasgos claros de ambos padres.

LA TERCERA SUBESPECIE: RUDERALIS

Los híbridos también pueden contener genes de otra subespecie de cannabis conocida como ruderalis. El Cannabis ruderalis es el responsable de las genéticas autoflorecientes, y se utiliza para aportar rasgos de autofloración a muchas variedades clásicas. Las variedades ruderalis florecen independientemente del fotoperiodo, y son bastante robustas y resistentes, ya que se han originado en las duras condiciones climáticas de Rusia.

Los cultivadores aprecian mucho los híbridos, ya que la mayoría de estas variedades modernas y estabilizadas mantienen alturas manejables y producen cosechas abundantes. Los cultivadores de interior, en particular, siempre han evitado las variedades muy altas debido a la limitación de sus espacios de cultivo. Ahora, existen híbridos sativa dominantes y sativa autoflorecientes que se pueden cultivar en espacios reducidos con excelentes resultados.

CÓMO SE CONSUMEN LOS HÍBRIDOS

Los híbridos se consumen de la misma forma que cualquier otra variedad de cannabis, pero permiten una mayor flexibilidad y variedad. En lugar de conformarse con una índica o sativa puras, los fumadores pueden elegir para experimentar con diversos efectos. Esto se puede afinar para descubrir la predominancia exacta de un híbrido y lograr los efectos deseados.

Esto resulta sumamente útil, y otorga un mayor control al consumidor sobre lo que fuma, vapea o ingiere. Los consumidores con fines recreativos pueden modificar el subidón para que se adapte a su estado de ánimo, y los consumidores con fines medicinales ahora disponen de una mayor variedad de opciones para combatir sus trastornos. ¿Quieres una variedad que relaje el cuerpo pero mantenga la mente lúcida? Elige un híbrido. ¿Quieres una variedad que acabe con el dolor y te haga sentir creativo y enérgico? Elige un híbrido. Encontrar el híbrido más adecuado para tus gustos y estilo de vida, ahora depende de ti.