Las mejores formas de almacenar semillas de cannabis

Antes de preocuparte por la iluminación y los nutrientes para tus plantas, tienes que prestar atención a las semillas de cannabis. La principal diferencia entre un buen cannabis y uno malo, se encuentra en las semillas y su germinación. El almacenamiento de semillas debe ser tu principal prioridad para garantizar que conserven sus genes intactos si decides cultivar sólo unas cuantas. No hay nada más frustrante que cosechar tus plantas y darte cuenta de que no han dado frutos.

Las Mejores Formas de Almacenar Semillas de Cannabis

Independientemente de 'dónde' guardes tus semillas, el recipiente en el que las almacenes va a influir en la tasa de éxito y la longevidad de tus apreciadas semillas. Lo ideal es que sea completamente hermético para evitar que entre humedad. Para controlar la humedad del recipiente se pueden utilizar bolsitas de gel de sílice o de arroz, que mantienen un nivel de humedad de entre el 10 y el 20%. No se debe eliminar toda la humedad, ya que esto podría afectar a la germinación de las semillas.

Frigorífico

La mayoría de bancos almacenan sus semillas en cámaras frigoríficas, y no hay ninguna razón para que tú no puedas hacer lo mismo. Puedes guardarlas en el frigo, siempre que la temperaturas sea de 4-8C. También es importante almacenarlas lejos de la luz directa, ya que esto también podría dañarlas. El mejor lugar para guardarlas es el cajón de las verduras de la parte inferior de la nevera, porque suele ser la zona más fría y protege a las semillas de la luz del frigo.

En estas condiciones, se pueden conservar durante 5-8 años

Congelador

Un método de almacenamiento muy debatido. Algunos creen que es la opción más realista, pero a menudo hace falta un equipo especial para que las semillas adquieran una temperatura susceptible de congelación. Esto impide que las células se descompongan, pero supone un gasto extra. Este método de almacenamiento no se recomienda para el cultivador corriente.

Armario

En un lugar fresco, lejos de cambios bruscos de temperatura. Además, debe ser un lugar oscuro lejos de toda luz, como en el caso del frigorífico.

En estas condiciones, se pueden conservar durante 1-3 años.