Cómo interacciona la marihuana con ciertos medicamentos

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Cómo interacciona la marihuana con ciertos medicamentos

Saber cómo el cannabis interacciona con ciertos medicamentos o con alcohol es importante para tu bienestar. Descubre qué sucede al combinar marihuana con fármacos comunes y sustancias recreativas.

CÓMO INTERACCIONA EL CANNABIS CON OTROS MEDICAMENTOS

La mayoría de medicamentos y drogas, ya sean fármacos de receta o sustancias para consumo recreativo, interaccionan entre sí en cierta medida. Los productos farmacéuticos incluyen advertencias en la descripción del producto sobre cómo interaccionan con otras sustancias. Estas sustancias pueden ser otros medicamentos, o cosas tan inocuas como el café o los pomelos.

El cannabis es una sustancia con fines recreativos y terapéuticos, que interacciona de varias formas con otros medicamentos. Las reacciones suelen ser leves y, de hecho, en ciertos casos el cannabis funciona conjuntamente con los fármacos. Pero, a veces, puede ser todo lo contrario. En lugar de dejar las cosas a merced del destino y acabar en el baño vomitando, o peor, esta guía describe la reacción del cannabis con una serie de fármacos comunes.

Cuando se combina con otras sustancias, el cannabis puede tener efectos aditivos o efectos sinérgicos. Un efecto aditivo es aquel en que el resultado de la combinación equivale a la suma de las partes, 1+1=2. En cambio, en un efecto sinérgico la combinación es mayor que la suma de las partes, 1+1=3 o más. El cannabis puede aumentar la eficacia de muchos fármacos, por lo que se recomienda la atenta supervisión de un médico.

Descargo de responsabilidad: la información a continuación no debe considerarse como asesoramiento médico. Como siempre, consulta con tu médico si tienes cualquier duda.

NIVEL DE AZÚCAR EN SANGRE

Algunos estudios han demostrado que los consumidores de marihuana son menos propensos a la obesidad, incluso teniendo en cuenta los “munchies”. El cannabis produce el efecto de aumentar la eficiencia corporal para metabolizar los carbohidratos. Los fumetas también tienen un menor riesgo de sufrir diabetes y un menor índice de masa corporal que los no-consumidores. Estos efectos son importantes cuando se toman medicamentos para reducir los niveles de azúcar en sangre.

Al combinar la marihuana con otros medicamentos, como la insulina, podría existir el riesgo de reducir demasiado los niveles de glucosa en sangre. Sin embargo, las pruebas no son concluyentes, ya que los estudios se basan en encuestas epidemiológicas amplias, que analizan los patrones generales dentro de las poblaciones. Además, hay pocas investigaciones sobre la interacción específica que podrían tener el THC, el CBD y los terpenos del cannabis cuando se combinan con los medicamentos para controlar el azúcar en la sangre. Para reducir riesgos, los pacientes que consumen cannabis deben controlar continuamente su sangre mediante analíticas, bajo supervisión médica.

HIPERTENSIÓN

La marihuana puede amplificar los efectos de los fármacos para la hipertensión, o presión arterial elevada. Los cannabinoides afectan a los receptores CB1 y CB2 del sistema endocannabinoide, de manera directa e indirecta. Esto aumenta el consumo de oxígeno cardíaco, a la vez que reduce el flujo sanguíneo en las arterias coronarias. Los informes sobre efectos adversos no son frecuentes, pero quienes toman medicamentos para la hipertensión deben ser conscientes de que el cannabis puede tener efectos combinados.

RIESGO DE SANGRADO

Los cannabinoides pueden aumentar los efectos de los medicamentos anticoagulantes, como la warfarina. Ciertos medicamentos conocidos por diluir la sangre, como el ibuprofeno, pueden causar efectos similares. El THC y el CBD también podrían ralentizar el metabolismo de estos fármacos, ya que el THC desplaza a la warfarina de los sitios de unión de las proteínas.

SEDANTES

Los sedantes influyen en los receptores GABA del cerebro para producir un efecto calmante. De modo similar, los cannabinoides y ciertos terpenos tienen un efecto sedante. Paradójicamente, el THC y el CBD también tienen efectos energizantes e inductores de la vigilia. Gran parte del comportamiento de los cannabinoides depende de su potencia, dosis y las combinaciones con los terpenos. El cannabis puede tener un efecto aditivo cuando se combina con otros sedantes. Sin embargo, la marihuana no eleva los niveles sanguíneos, ni realza los otros efectos de los medicamentos sedantes.

La combinación puede ser arriesgada, según la potencia del sedante y del cannabis. Las variedades índica más potentes son conocidas por sus efectos analgésicos y sedantes. Lo mejor es actuar con prudencia y no mezclar marihuana y sedantes, simplemente para estar seguros.

ALCOHOL

Aunque es probable que el alcohol sea la droga más aceptada a nivel social, irónicamente puede ser letal cuando se mezcla con otros fármacos. Es extremadamente peligroso mezclar alcohol con opiáceos, depresores del sistema nervioso central como benzodiacepinas, o medicamentos para dormir. Sin embargo, mucha gente mezcla alcohol y marihuana. ¿Es segura esta combinación?

Depende de tu punto de vista. El alcohol eleva los niveles de THC en la sangre, pero el THC no aumenta los niveles de alcohol. Las investigaciones indican que la gente bebe menos alcohol cuando consume marihuana. Un estudio del NIDA, de 1985, examinó los patrones de consumo en tres ambientes diferentes: cuando había disponibilidad de alcohol y cannabis, cuando solo había disponibilidad de alcohol, y cuando solo había disponibilidad de cannabis.

• El 87% de los sujetos consumieron considerablemente menos alcohol cuando ambos estaban disponibles, en comparación a cuando solo había alcohol.

• El 75% de los sujetos consumieron un poco más de cannabis cuando ambos estaban disponibles, en comparación a cuando solo había marihuana.

Estos resultados son comparables con la experiencia de mucha gente. Cuando ambos están disponibles, se consume más cannabis, pero mucho menos alcohol. El verdadero peligro reside en lo que haces cuando bebes y fumas a la vez. Conducir es mucho más peligroso cuando mezclas marihuana y alcohol.

Asimismo, es más probable que los consumidores realicen actividades de alto riesgo, pudiendo lesionarse gravemente, simplemente por hacer algo estúpido. Además, la marihuana previene las náuseas y vómitos. Por tanto, es menos probable que el cuerpo elimine las toxinas tras un consumo excesivo de alcohol. Esto resulta en un mayor riesgo de toxicidad por alcohol.

Cómo interacciona la marihuana con ciertos medicamentos

CITOCROMO P450

El citocromo P450 es una enzima esencial, conocida por jugar un papel importante en las interacciones con medicamentos dentro del cuerpo. No solo con el cannabis, sino con todos los medicamentos. Existen evidencias clínicas considerables que sugieren que el CBD es seguro y no adictivo. En muchos casos es antiadictivo, y cada vez se usa más como suplemento para intentar eliminar una serie de adicciones dañinas. En ocasiones, puede actuar sinérgicamente con otros medicamentos, ya sea de forma beneficiosa o adversa.

El CBD y el citocromo P450 interaccionan de forma más notable con los medicamentos anticonvulsivos y antiepilépticos. Un **estudio de 2015 observó que el CBD aumentaba las concentraciones sanguíneas del anticonvulsivo clobazam en niños. Al mismo tiempo, elevaba las concentraciones del metabolito del clobazam, el norclobazam. El clobazam puede producir efectos secundarios no deseados; por lo tanto, al aumentar la potencia de este medicamento con CBD podrían requerirse dosis más bajas. Según los resultados de la investigación, hubo una reducción del 50% en las convulsiones de todos los participantes del estudio, excepto en cuatro sujetos. Los investigadores concluyeron que el CBD, consumido como suplemento al clobazam, "es un tratamiento seguro y efectivo para la epilepsia refractaria".

OPIOIDES

Los efectos analgésicos del cannabis están bien documentados. Muchos profesionales de la salud lo consideran una alternativa a los analgésicos opiáceos, y como una forma de detener la oleada de adicción a estos medicamentos. Desde el punto de vista de la toxicidad y el abuso, la marihuana es mucho más preferible como tratamiento de primera línea para el dolor crónico.

El cannabis tiene gran potencial como complemento de la terapia con opioides. Un pequeño estudio, realizado en 2011 por el Dr. Donald Abrams y su equipo de la UC San Francisco, descubrió que el cannabis no elevaba los niveles de opioides en la sangre de los sujetos. Sin embargo, indicaba que los participantes experimentaron una reducción del 27% en los niveles de dolor al administrarles marihuana.

Su conclusión fue que el cannabis puede aumentar la efectividad de los medicamentos opioides, de forma segura. Esto tiene la ventaja añadida de poder tratar a los pacientes con dosis de opioides más bajas, disminuyendo el riesgo de dependencia y aliviando los efectos secundarios.

EL CANNABIS ES SEGURO EN GENERAL

En términos generales, el cannabis es seguro, se tolera bien y conlleva pocos riesgos cuando se usa en combinación con muchos medicamentos comunes. Sin embargo, no es un compuesto simple. La marihuana es la combinación de docenas de cannabinoides, incluyendo el THC, CBD y CBN, y gran variedad de terpenos y flavonoides, entre otros.

Las combinaciones varían de una cepa a otra y por sí mismas pueden proporcionar una serie de ventajas fisiológicas. Al no disponer de más estudios detallados, no pueden extraerse conclusiones precisas sobre las interacciones con otras drogas. Una cosa es segura; la marihuana por sí sola es un tesoro terapéutico, cuyos beneficios para la salud no están más que empezando a ser realmente apreciados.