Cómo evitar los cogollos con moho durante el secado y curado

Ha llegado el momento de la cosecha. Tras pasar varios meses cuidando de tus preciadas plantas de marihuana, combatiendo plagas y previniendo enfermedades, estás a punto de recoger los frutos de tu esfuerzo y dedicación. Tus cogollos tienen un aspecto extraordinario: gordos y jugosos. Te tientan con un aroma seductor, pero sabes que aún no puedes disfrutar de tu premio.

Antes de poder fumar tu hierba, deberás secarla y curarla. Para esta última fase del proceso, tendrás que evitar que las prisas se apoderen de ti. Cuando se seca y se cura el cannabis, es muy importante prevenir la formación de moho. De lo contrario, podría arruinar todas tus provisiones antes de que te des cuenta.

¿QUÉ CAUSA EL MOHO?

El moho es la peor pesadilla de cualquier cultivador de cannabis. Puede afectar a las plantas en todas las etapas del crecimiento, debido, por ejemplo, a una humedad alta como consecuencia de la lluvia en el exterior. La humedad es en gran parte responsable de la aparición del moho. Y no solamente durante el crecimiento, también después de la cosecha. De hecho, el mayor riesgo de que se extienda el moho por todos los cogollos, se da en estos últimos pasos esenciales para su preparación. Por ello, es fundamental eliminar todo exceso de humedad para evitar posibles problemas.

CÓMO SECAR LA MARIHUANA DE FORMA CORRECTA

La clave para secar el cannabis de forma correcta es hacerlo lentamente. Dedica bastante tiempo a este proceso y no utilices ningún método de "secado rápido", ya que este tipo de técnicas pueden destruir los cannabinoides y otros compuestos activos de la marihuana.

Muchos cultivadores de cannabis cuelgan sus cogollos para secarlos, o los colocan en tendederos en un entorno adecuado. El sitio ideal para secar cannabis debe tener muy poca humedad y estar apartado de la luz directa del sol. Esto no solamente ayuda a prevenir la formación de moho, también evita que los cannabinoides y terpenos se degraden. Un buen lugar para realizar el secado es una habitación oscura, o un armario. Si no tienes un cuarto adecuado para secar tus cogollos, mételos en una caja de cartón.

Para crear una herramienta apta para el secado de tu hierba, usa un trozo de cuerda o alambre para tender. Si quieres convertir una habitación en un cuarto de secado, tapa la luz de las ventanas con cortinas o persianas. También deberás asegurarte de que haya una buena circulación de aire; otro factor que reduce el riesgo de que se forme moho. Un ventilador de pie puede ser lo único que necesites para proporcionar un buen flujo de aire por toda la habitación. Pero comprueba que no sople directamente sobre los cogollos, ya que podría secarlos demasiado rápido. Recuerda: cuanto más tiempo se seque la hierba, mejor.

Utiliza un higrómetro y un termómetro para comprobar las condiciones del cuarto de secado. Lo ideal es que haya una humedad relativa de alrededor del 50%, y una temperatura de unos 20°C. Si no es así y no tienes otro sitio para llevar a cabo el secado, plantéate usar un humidificador o un deshumidificador. Mientras se seca la hierba, deberás comprobar de forma periódica que no esté desarrollando moho.

En la mayoría de los casos, esta forma de secado tarda entre 7 y 9 días. Para comprobar si los cogollos están listos para pasar a la fase de curación, puedes utilizar un viejo truco. Coge uno y dobla ligeramente su tallo. Si se rompe, la hierba está suficientemente seca y lista para curar. Si el tallo está aún blando y moldeable, dale unos días más.

CÓMO CURAR MARIHUANA DE FORMA ADECUADA

Pasemos a la fase de curación. El curado es el proceso mediante el cual el cannabis desarrolla todo su aroma y potencia. También garantiza que cualquier resto de humedad que haya en los cogollos se reparta uniformemente por todo el material. El exceso de humedad podría provocar la formación de moho, pero si es demasiado baja hará que la hierba esté demasiado seca, dura y quebradiza. Veamos varias maneras de curar la marihuana de forma correcta.

EN FRASCOS DE VIDRIO

La forma más habitual de curar los cogollos de cannabis es metiendo las flores secas en frascos de vidrio con tapa. Para proporcionar a tu hierba la cantidad adecuada de humedad, deberás abrirlos de vez en cuando.

Ábrelos durante una hora o más todos los días, con el fin de que el aire viciado y húmedo salga de su interior. Al principio de la fase de curado, tendrás que abrir los frascos 3 o 4 veces al día. Este método no es muy preciso, por lo que la hierba se debe comprobar a menudo y hacerlo a mano, lo que no siempre es posible. En condiciones muy húmedas, por ejemplo, podría introducirse más humedad en el frasco.

Sugerencia: cuando abras el frasco, sacude ligeramente los cogollos para que el aire circule tanto como sea posible.

La fase de curado suele durar entre 2 y 4 semanas. Una vez que creas que tu hierba está curada, podrás empezara a disfrutar de tu cosecha, y dejar los frascos cerrados de manera sistemática para su almacenamiento a largo plazo.

CON PACKS REGULADORES DE HUMEDAD

Para facilitar las cosas y eliminar conjeturas relacionadas con el curado de la hierba, utiliza packs reguladores de humedad de doble sentido. Solo hay que colocarlos en los frascos junto a la marihuana para que mantengan la humedad relativa ideal para el curado.

Algunas marcas conocidas de packs de humedad son Boveda e Integra Boost. Estos packs están disponibles con distintos niveles de conservación de HR, como un 72%, un 62% o un 55%. El pack de humedad ideal para el curado dependerá del tipo de hierba y de tus preferencias personales, pero el del 62% es un buen comienzo para el cannabis. Los packs de humedad se pueden adquirir en internet, en grow shops y también en estancos.

CON UNA BOLSA DE PAPEL

Aunque los frascos de vidrio con tapa son probablemente la mejor forma de curar la hierba, también se puede hacer en una bolsa de papel marrón. Las bolsas de papel eliminan la humedad de la marihuana, minimizando el riesgo de que se forme moho. Asegúrate de no usar bolsas de plástico. Para curar tu hierba en una bolsa de papel marrón, coloca los cogollos dentro, pero sin saturarla. Este método de curado no es muy preciso, por lo que deberás comprobar el cannabis de vez en cuando, con el fin de detectar a tiempo cualquier indicio de moho.

¿QUÉ HACER SI TIENES COGOLLOS CON MOHO?

Lo primero y más importante: no consumas cogollos con moho bajo ninguna circunstancia. El moho es nocivo para la salud, y no es algo que quieras ingerir en cualquiera de sus formas. Si mientras lo secas o curas, ves que tu material vegetal tiene moho, deshazte de los cogollos enmohecidos inmediatamente. Si tienes suerte, el moho no se habrá extendido por toda la cosecha. Examina atentamente tus cogollos para ver si presentan otros síntomas de moho. Si ves algo sospechoso o tienes dudas, lo mejor es deshacerte de todas tus provisiones. No es lo ideal, pero es mucho mejor que arriesgar tu salud.

CÓMO EVITAR COGOLLOS CON MOHO AL SECARLOS Y CURARLOS: RESUMEN

Cultivar plantas de cannabis con éxito es solo el primer paso para conseguir un cogollo de calidad. Antes de conseguir una cosecha abundante, puede pasar de todo, desde infestaciones de insectos a enfermedades y problemas de fertilización. Los procesos de secado y curado son igual de importantes para poder disfrutar de tu trabajo. Si sigues los consejos de esta guía, no perderás tus preciados cogollos por culpa del moho tras la cosecha.

¡Feliz cultivo!